Cambiando Unidades de Control a Universidades
Como ya lo sabemos, unidades de control son cámaras de tortura donde prisioneros pasan de 22 a 24 horas al día encerrados en una celda pequeña por largos periodos del tiempo con una luz cegadora quemando todo el día, sin programas ni educativos ni de otras formas, y sin la debida atención médica y de la salud mental. Estamos forzados en vivir adentro con marranos que nos oprimen cada día. Estas condiciones son intentados en quebrar el espíritu y estado mental de los prisioneros. Son herramientas de opresión. Aquí he visto prisioneros darse por vencido y perder toda la esperanza, perdiendo sus estados mentales, dañándose y aun suicidarse. No hay duda que estos lugares horríficos afectan al estado mental de un prisionero, es decir la mayoría de ellos. Sin embargo, podemos y debemos cambiar estos cámaras de tortura en nuestros universidades, por el mejoramiento de nosotros y por nuestros camaradas oprimidos.
La primera vez que fui colocado en una unidad de control (aquí en Florida son llamados unidades manejados muy de cerca [se refiere como CM en el resto de este artículo]) hice dos años encerrado en una celda pequeña 24 horas al día. En mis primeros meses estaba desperdiciando mi tiempo, peleando y leyendo libros de ficción que matan la mente. Estaba ciego a la lucha - nuestra lucha, el oprimido contra el opresor. Luego, un día, un camarada me pasó un libro llamado El último hombre de pie por Gerónimo Pratt, un miembro alto del Partido Negro Pantera. Ese libro dio chispa al revolucionario dentro de mí y desde luego no he mirado atrás. Luego conocí a George Jackson, a Mao, a Lenin y a Che entre otros. Eso fue cuando empecé a formar y organizar mis ideales. Cuando mi familia me preguntaba si necesitaba dinero para cantina, les decía que no. En lugar de eso, les pedía que me mandaran libros sobre o escritos por los camaradas sobre mencionados y empecé a estudiar todo el tiempo.
Al pasar del tiempo un camarada me dio una copia de Bajo Cerradura y Clave y me encanto. Eso me subió en la lucha de la prisión. Empecé a corresponder con MIM(prisiones) y después de un tiempo empecé a escribir artículos para ellos. Los camaradas en MIM(prisiones) me aprovisionaron con materiales buenos y muy necesarios para estudiar y seguí trabajando fuerte de parte de la lucha-nuestra lucha. He aprendido a disciplinarme y organizarme en una manera que nunca imaginaba posible. Mientras que crecía mentalmente y aumentaba mi conocimiento de la lucha, lo compartía con otros y ayudé a despertar a sus conscientes.
No tenía acceso a nada salvo lo que MIM(prisiones) me mandaba y mis únicos oportunidades de salir de mi celda era cuando tenía que ver el personal médico o de salud mental y cuando teníamos el recreo en un pequeño jaula de perro y duchas 3 veces a la semana. Sin embargo, Me negué todo esto. Yo pensé - y todavía pienso- que por ir a estos estaba malgastando el tiempo que pudiera usar para estudiar y hacer trabajo por la causa. Yo hacía ejercicios y tomaba baños de pájaro en la celda. Yo aun estudiaba cuando se apagaban las luces. Usaba una poquita de luz que entraba por la ventana de atrás desde un poste de luz de pie afuera del edificio.
Los marranos estaban acostumbrados al ir y hacer sus revisiones y ver a
los prisioneros acurrucados en sus camas no haciendo nada o solo mirando
al vacio mientras se hablaban a sí mismos. De hecho, les gustaba a ver
esto porque sabían que estaban venciendo las mentes y espíritus
combatientes de los prisioneros. Pero lo odiaban cuando caminaban por mi
celda y me veían sentado en el piso con todo tipo de libros,
diccionarios, papeles y plumas alrededor de mi. No me podrían agrietar -
mucho menos destrozarme - y eso les comía adentro. No les daba la cansa.
Estaba - y todavía estoy - peleándolos hasta el último final. Si no
puedo pelearles físicamente, les pelearé ellos con papel y pluma por
correr la voz de la lucha y ayudar a otras personas oprimidos
despertarse sus conscientes.
Cuando yo estaba a punto de ser
soltado a la población abierta me dije a mí mismo que si empezaba
descarrilarme y perder mi disciplina que regresare a la CM adrede para
empezar disciplinarme de nuevo. Cuando finalmente fui soltado en al fin
de 2009, la gente que me conocía antes no me asociaban mucho conmigo
porque no podían relacionarse a mi nuevo estado de mente.
Afortunadamente, yo pude despertar algunos y unírselos las fuerzas en la
lucha.
En mi primer prisión, después de salir de la CM, pronto formé un grupo de estudios con 9 camaradas y de lo cual el camarada que me introdujo a MIM(Prisiones) era una parte. De cualquier manera, la prisión en la que estábamos era extremamente racista y opresiva y los marranos empezaron a centrársenos. Por ser portavoz del grupo me consideraban el líder y solamente por eso saqueaban y destruían mi propiedad personal cada vez que tenían la oportunidad, me amenazaban, y luego me encerraban en solitario con cargos falsos. Finalmente me trasladaron a otra prisión.
En la siguiente prisión los marranos ya sabían de mi, entonces en cuanto a llegué las búsquedas y la destrucción de propiedad personal continuaban. Pero eso ni me quitó las ganas ni sacudió mi confianza. En unas cuantas semanas tenía otro grupo de estudio corriendo. Pero luego, ni un año después de mi salida de la CM tuve un pleito con otro prisionero quien era un soplón para los marranos y regresé a la CM donde me encuentro presentemente.
He llegado a la conclusión que la populación abierta no es para mí. Me quita demasiado de mi tiempo del estudio. Tiempo para estudiar que necesito cuando sea soltado a la sociedad. Además, en CM no tengo marranos en mi cara todo el día. En la población abierto hay una gran posibilidad que yo le dañe a uno de ellos gravemente y agarre más tiempo en prisión. Entonces he decidido en hacer mis 14 años que me faltan en una celda solitario. Esto pueda ser útil para mí, pero no es para todo porque todo ni lo entiende ni aprecian tal como yo.
Si no tiene ninguna opción sino que estar en una unidad de control, no desperdiga su tiempo. No deje que estos malditos marranos te quiebren. Convierta tu cámara de tortura en la cual te encuentras en tu universidad. Lea, estudie, edúcate a ti mismo. Suscríbete a Bajo Cerradura y Llave y otros materiales de MIM(Prisiones). Si no tienes muchos materiales que estudiar, estudia lo que tienes una y otra vez. Estarás sorprendido con cuanto podrás aprender con leer la misma cosa una y otra vez. Todavía tengo el primer Bajo Cerradura y Llave que leí, que me fue dado por ese buen camarada 3 años antes, y todavía lo leo de vez en cuando. Y cada vez que lo leo, aprendo algo nuevo.
Pues camaradas, despiértense y pónganse a estudiar. Enséñenles a los marranos que no permitan que se les quebranten y que están dispuesto a pelear, a aprender y luchar…y a convertir sus cámaras de tortura en su universidad. No la conviertas en tu cementerio mental y físico.